Exfoliar la piel es importante porque ayuda a renovar la piel. Y esto, a su vez, ayuda a que los tratamientos que apliquemos después, como la crema hidratante o tratamiento anti-envejecimiento, penetren mejor y sean más eficaces.
Si complementamos la exfoliación con una mascarilla, terminaremos de remover el exceso de aceites y mejorará la apariencia de los poros. También, extraeremos las impurezas y le daremos a la piel una sensación de confort única.
El exfoliante facial
A pesar de sus beneficios, no es bueno abusar del exfoliante facial, debe usarse en función de tu tipo de piel:
- Piel sensible y con tendencia a irritarse: utilizar exfoliante una vez o dos a la semana.
- Piel grasa y gruesa usarla una vez por día.
Para exfoliar correctamente la piel debes:
- Humedecerla antes con agua para evitar que sea agresiva y provoque irritaciones en tu piel.
- Realizar un masaje suave y frotar todos los rincones del rostro y cuello con paciencia, evitando frotar con fuerza.
- No prolongarla más de 5 minutos.
- Enjuagar con abundante agua tibia para eliminar los restos.
Tras exfoliar tu rostro, la piel estará fina y suave al tacto, un aspecto más fresco y saludable. Pero lo más importante, mejorará su poder de absorción, oxigenación y regeneración.
La mascarilla facial
Las mascarillas faciales ayudan a abrir los poros, limpiar en profundidad y eliminar las impurezas, dejando la piel más limpia y suave.
Son el complemento ideal para completar el ritual de limpieza y belleza de tu piel, contribuyendo a:
- Relajación: no sólo mejoran la apariencia general de la piel, sino que también pueden ser terapéuticas: pueden estimular tus sentidos y mejorar tu estado de ánimo.
- Limpieza de los poros removiendo la suciedad y el exceso de aceites. Además ayuda a remover la acumulación de células muertas que se acumulan en la piel. Cuando eliminas todos los desechos de la superficie de la piel, te ayuda a limpiar los poros también. regularmente ayuda a mantener la superficie de la piel limpia y los poros libres de obstrucciones. Esto puede ser un motivo excelente para usar una mascarilla ahora mismo.
- Limpieza profunda ayudándote a eliminar las impurezas que se esconden debajo de la capa superior de la epidermis. Se “desintoxica” la piel.
- Piel radiante pues estimulan la circulación sanguínea. Cuando la mascarilla se seca en y comienza a endurecerse ayuda a la expansión de los vasos sanguíneos en la piel. Esto asegura una mejora general en el tono de la piel.
Exfoliantes y mascarillas Aldem
Aldem es una marca especializada en cosmética farmacéutica. En su gama básica de cuidado facial encontramos productos exfoliantes y mascarillas frutales que ayudan a cuidar la piel.
Esta marca dispone de productos para:
- Purificar la piel mixta y grasa con su Exfoliante (piel mixta-grasa) + Mascarilla facial (piel sensible o seca) a base de aceites frutales que ayudan a reducir el exceso de sebo. Sus propiedades calmantes y regeneradoras proporcionan sensación de bienestar, dejando la piel confortable y con aspecto mate.
- Regenerar la piel con el exfoliante (piel mixta-grasa) y la mascarilla (piel sensible o seca) a base de Aceite Rosa Mosqueta que aumenta la producción de colágeno, calma y regenera la piel eliminando eficazmente las impurezas de la piel mixta y grasa, y reduciendo el exceso de sebo.